jueves, 19 de noviembre de 2009

3 comentarios:

Antonio Garcia Cartagena dijo...

El 18 de julio de 1936, gran parte del ejército español declara el estado de guerra. En Vigo, donde triunfa el alzamiento, se encuentra fondeado el acorazado "Jaime I", el mayor buque de guerra del país.
Ese mismo día, el buque pone rumbo sur, y, frente a la costa portuguesa ocurre un motín a bordo. Marinería y suboficiales se rebelan contra la oficialidad del barco. El comandante de la nave y el segundo de abordo toman partido por la marinería. Durante unas horas se produce un intercambio de disparos. Al final, los marineros apresan a los oficiales supervivientes. Los amotinados han vencido, pero en este caso los amotinados son los leales al mando de la flota y al gobierno del país. El gobierno legítimo de la República.

El radiotelegrafista informa por radio de la adhesión el acorazado a la República. El ministro de Marina, José Giral, duerme tranquilo. La gran mayoría de buques de guerra se amotinaron contra los golpistas. La flota de submarinos y los medios aeronavales también permanecen leales.
El día 20, el "Jaime I" recala en Tánger (ciudad internacional que durante la SGM fue tomada por España para el Tercer Reich). En aquel puerto se reúne el grueso de la Escuadra republicana.

Nuestro acorazado toma parte en diversas operaciones de bombardeo de costa con otros buques como el Cervantes, Libertad, Lepanto, Escaño, José Luis Díez, Almirante Antequera, Almirante Miranda, Almirante Valdés…
El 13 de agosto del 36, una escuadra alemana de Junkers-52 logra matar a 25 marineros durante un raid aéreo al puerto de Málaga.

En otoño, tras el infructuoso apoyo al Ejército del Norte, el Jaime I regresa a Cartagena. Antes informan a los nacionalistas de sus intenciones… les retan a que presenten batalla. Los aviones alemanes doblan sus patrullas sobre el Estrecho. Vano intento. El Jaime I lo cruza a toda máquina con las luces apagadas burlando el bloqueo.
El 15 de abril del 37, la nave sale dañada de una batalla naval en el Estrecho. El 21 de mayo es alcanzado por la Fuerza Aérea Italiana. Recibe varios impactos de los Saboya-79 (a grandes rasgos la fuerza aérea española fue leal a la República, Franco tuvo que apoyarse en forasteros para guardar sus cielos).

El 17 de junio, mientras era reparado en Cartagena (principal base naval de la República, los nacionalistas tenían Ferrol), una misteriosa explosión lo hunde. Más de 300 muertos y centenares de heridos constituyen el trágico balance del suceso.
Semanas después los ingenieros de la marina lo reflotan. Sus piezas artilleras son desmontadas y reubicadas a lo largo de la costra republicana (Andalucía oriental, Levante y Cataluña, eran enormes cañones de 305mm y 101 mm).

En 1941 el barco -lo que quedaba de él-. Fue desguazado.
¿Cuál fue la causa de la deflagración que hirió de muerte a la nave capitana de la flota republicana? ¿Sabotaje? ¿Explosión espontánea de la pólvora? La Historia todavía no nos ha dado una respuesta…

Y ahora suelto yo mi speech: con una historia tan rica como la española ¿por qué no se hacen superproducciones de cine hollywoodianas? La historia del Jaime I y de muchísimos barcos de la escuadra republicana nada tienen que envidiar al Acorazado Potemkim o al motín de la Bounty.
¡Marítimos saludos!

Suso Rodriguez Villadoniga dijo...

Soy hijo de un superviviente del jaime 1.Mi padre pertenecia ala tripulacion,era marinero de1º.Y se encontraba de servio cuando el acorazado se undiò en Cartagena,su nombre era,Severino Rodriguez Piñon,,un saludo''

Unknown dijo...

Soy nieto de oficial de artillería del acorazado, aunque se adhirió a la República y lucho como oficial jefe de la motorizada en madrid, alguien tiene fotos de tripulación